Por Universia
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Los expertos se siguen debatiendo entre las oportunidades que brindan las nuevas tecnologías y el peligro de la automatización de tareas.
El sistema educativo debe ser capaz de integrar las nuevas tecnologías, de manera que el impacto laboral sea menor y los profesionales estén preparados para asumir los cambios.
Sectores como la educación o la sanidad se verán beneficiados por la integración de la Inteligencia Artificial, mientras que los empleos basados en tareas rutinarias corren más peligro.
La integración de la Inteligencia Artificial en procesos productivos y la automatización de tareas comienza a ser una realidad y una tendencia que nos indica que debemos prepararnos para el nuevo entorno laboral que se está gestando.
Según la opinión general recogida en el estudio de Gallup and Northeastern University en octubre de 2017, la mayoría de consumidores – un 73% exactamente – cree que las nuevas tecnologías eliminarán más empleo del que crearán.
Los informes profesionales y su visión optimista
Sin embargo, la mayoría de informes realizados por consultorías y empresas especializadas en estudios de mercado, prevén la irrupción de la IA como algo positivo y optimista para el mercado laboral y la economía global.
El estudio publicado en noviembre de 2017, “Reworking the Revolution”, realizado por Accenture Strategy, recoge la opinión de 14.078 profesionales y 1.200 ejecutivos, de 11 países, concluyendo que:
- Un 67% de los encuestados cree necesario aprender nuevas habilidades y renovar la formación para trabajar con las nuevas tecnologías de aquí a cinco años.
- Un 62% se muestra optimista ante la generación de empleo que traerá la Inteligencia Artificial.
- Un 45% cree que la IA mejorará la eficiencia del trabajo y la rentabilidad de los negocios.
La opinión de los ejecutivos
Las élites directivas calculan un incremento de los ingresos de las organizaciones en un 38%, para el 2022 y un aumento del 10% del empleo especializado y cualificado con la integración de la IA y la automatización de ciertos procesos.
Un 54% de los ejecutivos participantes en el estudio apuestan por integrar el binomio personas-máquinas para cumplir los objetivos estratégicos.
Un 72% defiende la incorporación de las tecnologías como elemento diferenciador y ventaja competitiva para su marca.
En conclusión, la mejor eficiencia y productividad de las empresas derivarán del empleo de la IA y con ello, en el crecimiento y cualificación de sus plantillas, quienes deberán de estar preparados para el nuevo contexto laboral y dispuestos a colaborar con las máquinas en su trabajo.
Prepararse para el cambio
Alberto Zamora, Managing Director de Accenture Strategy, insiste en que estas previsiones positivas solo son viables si las empresas comienzan a invertir en la formación de sus plantillas y siguen estas pautas:
Todo apunta a que tecnología y empleo son fuerzas compatibles si se consigue paliar el impacto desigual e integrar a los trabajadores de nivel medio y bajo, cuyos empleos serán automatizados, en profesiones cualificadas.
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